El Líder de la Secta y de la Banda

 

1.

Dicen que en Ferraz resuena,

como misa de devotos,

Pedro sale por la ventana,

derrama privilegios

y se arrodillan nacionalistas y los otros.

Marisú golpea su pecho,

Patxi, de helado corazón, contento,

y entre soles, chistorras y algún berro,

la ganaderia pasta, sobres, vive su cuento.

2.

Unos lo llaman mesías,

otros guía providente,

y aunque suenen herejías,

lo proclaman inocente.

La diputada lo eleva,

a los altares sagrados,

y en la secta ya se prueba,

que no existen pecados.

3.

Begoña es santa y martirio,

“¡yo sí te creo!” se grita,

cualquier informe es delirio,

y la secta lo acredita.

La UCO escribe cien papeles,

la Intervención da sospechas,

pero responden con fieles,

y estampitas bien estrechas.

4.

El enemigo es demonio,

se fabrica en procesión,

sea Franco, Biedma, Peinado,

sea Trump, Netanyahu o Leopoldo.

El rebaño nunca falla,

repitiendo la oración,

con pancarta y con pantalla,

todo es fe sin discusión.

5.

Ya no queda voz contraria,

ni debate ni plural,

la secta se hace gregaria,

bajo el dogma celestial.

Quien discrepa es apóstata,

traidor de la sacristía,

y lo arrojan cual anacoreta,

fuera de la romería.

6.

Pero además de santuario,

hay un coche en carretera,

un Peugeot confesionario,

viaja la cúpula de la banda entera.

Koldo graba y conduce todo cordiné,

Pedro como dios blindé,

y los otros, menos tiernos,

reparten putas y de la comisión parné.

7.

Ábalos fue sacrificado,

primer cordero del rito,

su destino fue marcado,

cuando el líder lo maldijo.

Ya sin cartera ni gloria,

lo dejaron en la cuneta,

un apóstol con memoria,

por ello en elecciones a la papeleta.

8.

Cerdán comía en la mesa,
del banquete del caudillo,
mas la risa fue sorpresa,
cuando le cortaron brillo.
Del altar a la cuneta,
pasó rápido el señor,
y hoy repite la receta:
“el silencio es lo mejor”.

9.

Koldo fue el más desdichado,

del banquete a la mazmorra,

la secta lo ha abandonado,

y la ganadería no se asombra.

Con esposas en las manos,

y la prensa en procesión,

es ejemplo para hermanos:

por si acaso, grabación.

10.

Pedro líder de la secta,

Pedro capo de la banda,

el que absuelve y el que infecta,

según se incline la balanza.

En Ferraz rezan su nombre,

en el coche manda igual,

y la ganadería nunca asombre,

si confunden lo legal.

11.

Los ministros son coristas,

en el coro del convento,

Bolaños exclaviza las listas,

Patxi grita “¡Presidenta!” al viento.

Cada acto es ceremonia,

cada rueda, procesión,

y aunque el Peugeot huela a coña,

se mantiene la oración.

12.

¿Supo Pedro o no sabía,

de la trama del votante?

¿Fue vidente o catequía,

o dormía en el instante?

La secta dice que nunca,

que su guía es impecable,

y aunque el coche huela a trampa,

en su parte del muro es intocable.

13.

El lider conocía al dedillo,
cada nombre y cada historia,
cada trato, cada brillo,
cada sombra y trayectoria.
No se viaja en ese coche,
con tres hombres tan marcados,
sin que el dueño de la noche,
esté al tanto de sus pasos.

14.

Pero el rebaño lo absuelve,
con sonrisas y plegarias,
“nuestro Pedro nunca muerde,
ni ha tenido malas mañas”.
Y aunque el coche huela a trampa,
aunque el viaje huela a farsa,
la secta todo lo canta:
“¡Pedro siempre nos ampara!”.

15.

Así el culto se sostiene,

con pancarta y pegatina,

con lemas que nadie frene,

desde su altar en Moncloa.

Y aunque el coche ya derrape,

y la misa sea de feria,

los lugartenientes dan el rapé,

y la secta sigue seria.

16.

No es política corriente,

es dictadura y es liturgia,

con mentira siempre presente,

y con banda en tribunales, la penuria.

Unos creen en la victoria,

otros temen el abismo,

pero al final toda historia,

huele a secta y a sanchismo.